V Congreso Nacional de Periodismo Sanitario

El Auditorio del Hospital Clínico San Carlos, en Madrid, se convirtió en el escenario del V Congreso Nacional de Periodismo Sanitario, que se celebró los días 23 y 24 de octubre bajo la organización de la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS) y la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE). En el encuentro, se analizó el momento de crisis e incertidumbre que vive el periodismo actual, en relación con el incremento y la necesidad de comunicación que se demanda desde los centros hospitalarios hoy en día, en confluencia con las nuevas tecnologías.

Ángel Expósito, director del diario ABC, recordó que el gran problema del periodismo en este momento es el paro, lo que implica una falta de libertad en el ejercicio de la profesión, condicionada por la necesidad de defender un puesto de empleo en una dedicación, ya de por sí, marcada por la precariedad. Por su parte, el presidente de Asociación Española de Periodismo Científico, Manuel Toharia, habló de las premisas para abordar un periodismo que, a su vez, cuenta también con dimensiones sociales y científicas.
El Congreso contó también con la intervención del consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Juan José Güemes, quien habló del Hospital del futuro, así como de una curiosa mesa redonda en la que se abordaron los nuevos retos médicos con los siguientes especialistas: José López Barneo, catedrático de Fisiología de la Facultad de Medicina de Sevilla; Simo Schwartz, coordinador de Nanomedicina del CIBBIM en el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona; Julio Mayol, director de la Unidad de Innovación en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid; así como con Javier Colás, vicepresidente de Fenin y presidente de la Fundación Tecnología y Salud. Los avances alcanzados en la medicida regenerativa, el desarrollo de la nanomedicina, la incorporación de las nuevas tecnologías al mundo médico o la innovación en salud fueron algunos de los puntos desarrollados por estos expertos, voces también básicas y necesarias a la hora de informar sobre temas sanitarios.

Sin embargo, si algo ha sido especialmente relevante en el campo informativo sanitario a lo largo de 2009 sin lugar a dudas se trata de la aparición del nuevo virus de la Gripe H1N1. MªJesús García, directora de Comunicación del Ministerio de Sanidad y Política Social, defendió la postura de la Administración con los medios ante este tema, habiéndose logrado, subrayó, "un equilibrio entre la premura de los medios y la necesaria tranquilidad que necesitan los médicos para investigar". Por su parte, José María Martín Moreno, asesor para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aclaró ciertos conceptos al recordar que esta gripe es un nuevo virus complejo no visto hasta ahora, dado que se compone de material porcino, aviar y humano. Una patología que, realmente, tiene baja virulencia, si bien llega "con claras características pandémicas". En este sentido, la representante de Comunicación de la OMS para Europa, Cristiana Salvi, defendió la "confianza" como el objetivo final de la Comunicación de Brotes Endémicos, a través de mensajes adecuados que, a su juicio, no pueden ser unilaterales por parte de los científicos a la población. Para garantizar su efectividad, deben basarse en un diálogo entre ambas partes, dentro del cual juegan un papel fundamental los medios. "La voz de los medios de comunicación es la más escuchada por la población. La comunicación debe ser un instrumento de la sanidad pública", sentenció.
Este Taller de Trabajo contó además con la intervención de Bernardo Graue, asesor de la Embajada de México en España, quien lamentó el triste papel que ha desempeñado su país en la mal denominada Gripe A, y llamó la atención sobre la importancia de 'vacunar' la ansiedad y el temor, ofreciendo transparencia y abogando por orientar más que alertar y sembrar el miedo. Por último, el director de la Fundación para la Formación de la OMC (FFOMC), Jesús Lozano, denunció la "intoxicación informativa" que se ha producido a consecuencia de esta enfermedad que, no en vano, ha coincidido con otras crisis sociales y políticas lo que, sin duda, "influye en el ánimo de las personas" y condiciona su planteamiento en los medios.
Precisamente, los medios y periodistas han formado el otro vértice de esta crisis sanitaria. Para mostrar su punto de vista, el V Congreso Nacional contó con la presencia de Emilio de Benito (redactor de El País), Coral Larrosa (de Informativos Telecinco), MªTeresa Antona (jefa de Sociedad de Servimedia) y Eva de la Torre (periodista de La Voz de Almería). Todos ellos defendieron el trabajo realizado ante la llegada de una 'nueva gripe' y una primera ausencia de información fiable y coordinada.

El último día del Congreso de ANIS, el 24 de octubre, se procedió a la presentación de la nueva 'Guía de Información Sanitaria', a cargo de Antonio González, redactor de Público, y Lucía Barrera, subdirectora de Bien y Contenidos. Ambos denunciaron una conciencia creciente en los centros hospitalarios, "pero aún insuficiente", de la importancia de la comunicación como elemento transversal. "Hay un mayor peso de los departamentos de comunicación y mayor cultura acerca de la necesidad de informar pero, ¿hay suficiente transparencia informativa?", criticó Barrera quien, no en vano, denunció un punto débil en este nuevo engranaje: la agilidad.
El papel de Internet y su condición de espacio común para pacientes y periodistas fue el último análisis realizado en esta importante cita sanitaria e informativa. En él, Javier Celaya, consultor de WEB 2.0, y Milagros Pérez Oliva, defensora del lector en El País, mostraron, bajo la moderación de Esteban Bravo (director general de Cícero Comunicación), una interesantísima exposición de las ventajas y riesgos que presenta Internet, los nuevos buscadores y redes sociales a la hora de informar. Una revolución tecnológica que garantiza un acceso constante a la información pero que, también, está exenta de rigor informativo y amenaza con prescindir de los intermediarios incómodos: los periodistas.

Avalado por especialistas médicos y mediáticos, el V Congreso suscitó el interés de más de un centenar de periodistas, profesionales médicos y alumnos del I Curso de Periodismo Sanitario de ANIS y la Universidad Complutense de Madrid (precisamente en el encuentro se dieron los diplomas de este curso y se presentó la segunda edición), quienes, además, tuvieron la oportunidad de cenar en la Bolsa de Madrid gracias al interés de la Organización, liderada por José Manuel González Huesa, presidente del Comité Organizador.
Dos interesantes jornadas en las que periodistas y médicos acercaron posturas en un interés común: la defensa de una información sanitaria que respete el derecho al conocimiento que tiene todo receptor o paciente, siempre desde los principios de la transparencia, la verdad y el rigor.

Sweet Child O'Mine

Es mi canción favorita, por encima de cualquier otra. La primera que aprendí en inglés, la primera que canté en el jardín de la Universidad al amparo de risas, una guitarra y minis de calimocho, la que tarareaba en los bares de marcha o la que motivó muchas de mis camisetas de entonces. ¡Qué tiempos aquellos!
Sweet Child O'Mine fue la canción número nueve del primer album de los Guns N'Roses, 'Appetite for Destruction', editado en 1987 (uno de los primeros mejores trabajos de la historia del hard rock). El disco, precedido por la demoledora 'Welcome to the Jungle' (qué buena es esa canción también), presentaba a una banda que se convertiría en icono de los años 90 con algunas de las canciones más representativas del género (Patience, You Could be Mine, Paradise City, November Rain, Don't Cry...), y que cumpliría los iconos de la historia con continuos escándalos en torno al alcohol y las drogas. Su leyenda estaba servida.
Hoy, cuarentones todos, dirimen el futuro de los Guns tras la edición, en 2008, del sexto y hasta ahora último album de la banda, 'Chinese Democracy'.
Ojalá les quede mucho por delante aunque debo admitir que apenas conozco este último trabajo. Soy una enamorada de sus primeras canciones. Quizás porque 20 años después aún hoy consiguen ponerte los pelos de punta y emocionarte por su fuerza y acordes.
Para aquellos que no conozcáis mucho de estos cinco rebeldes procedentes de Los Ángeles, y sobre todo para los que hayáis descartado su música por considerarla demasiado 'hard', os recomiendo su Greatest Hits, editado en 2004, donde se recopilan sus canciones más conocidas e importantes. Os sorprenderá.
Por el momento, os dejo con la que considero la mejor balada de la historia del rock (no soy nada imparcial, lo sé, pero así es) y la presentación de Slash como uno de los mejores guitarristas de su generación (el solo de guitarra es, sencillamente, fantástico).
Disfrutadla.

Mercado de 'El Quijote'

Un año más, coincidiendo con el puente del Pilar y como acompañamiento a la celebración de Cervantes en Alcalá de Henares (9 de octubre), el Mercado del Quijote hizo las delicias de las decenas de miles de alcalaínos y visitantes que durante estos días pasaron por los más de 300 puestos distribuidos por todo el casco histórico de la ciudad (Plaza Cervantes, calle Mayor y plaza de la Magistral, principalmente). Fiesta de Interés Turístico Regional, a la oferta de los expositores se han sumado pasacalles, guiñoles, animaciones o teatro, entre otros, en un alarde por hacernos volver a la época antigua.
El Mercado se engloba en la Semana Cervantina que también ha contado con Jornadas Gastronómicas, la XXIV Feria del Libro Antiguo y de Ocasión, el V Certamen Internacional de Tunas o el X Encuentro Coral Cervantino, así como la Gala de Entrega de los Premios Ciudad de Alcalá o la Restauración de la Torre de Santa María. Una oportunidad única para disfrutar de la historia en la era de la modernidad.

Tenía una corazonada...

Tenía una corazonada...
Y es extraño porque hace unos años asistí a la elección de Londres 2012 y admití que tanto ella como otras ciudades tenían candidaturas más espectaculares que la nuestra.
Pero tenía una corazonada...
Lo que resulta curioso porque no ha sido hasta hoy cuando he prestado interés a un proceso de magnificación que hasta ahora, aquí lo admito, no me entusiasmaba.
Y la cuestión... es que tenía una corazonada.
Pese a ser una de las acérrimas convencidas de que los Juegos Olímpicos deben ser parte del mundo y por ello no es lógico ubicar unas Olimpiadas durante dos ediciones consecutivas en el mismo continente.
Pero ahí seguía... la corazonada.
Y encendí la televisión y me conecté a Copenhague, a sólo 15 minutos de la exposición madrileña ante el Comité Olímpico Internacional, enganchándome a su desarrollo con ciertas reservas al principio.
Y fue ahí, ahí, cuando la corazonada fue haciéndose grande, ocupándome el pecho en los minutos previos y llenándolo de orgullo y emoción durante la presentación de nuestra candidatura. No era por ser mejor que los demás, era por sentirnos auténticos. Por pertenecer a algo.
Seguía la corazonada.
Lo hacía con menos fuerza porque la exposición de Río había sido brillante con un Lula Da Silva entregado y el efecto Obama podía influir en Chicago. ¿Tokio? Nunca entró en las apuestas. Su cercanía con Pekín 2008 y su carencia emotiva les habían condenado desde el principio. Las Olimpiadas necesitan pasión y de eso a nosotros nos sobra.
Quizás por ello, seguía la corazonada.
Y hasta nos hizo rozar la gloria cuando Chicago cayó en la primera vuelta arrastrada por un limitado proyecto y por un presidente con una exposición demasiado personal y una salida a lo 'Chirac'. El siguiente debía ser Tokio.
Por eso, tenía la corazonada...
La caída de la propuesta nipona y la hora de espera apenas fueron nada en un momento en el que el corazón latía a toda prisa y el pensamiento vagaba entre posibilidades, abordando la justicia histórica que Europa y el mundo debía tener por Sudamérica, y nuestra propuesta, mejor a todas luces y cargada de pasión. Es quizás en estos momentos cuando te sientes más española que nunca.
Y fue por ello por lo que continuó la corazonada...
Se desinfló al oír el nombre de Río, de forma calmada, tal como vino. Y la pena instantánea dio paso a la vida, a nuevos intereses y nuevas emociones, a nuevas ilusiones, compases de espera y recuerdos. Porque al fin y al cabo, tampoco nos importaba tanto hasta hoy, y tampoco es algo que cambie de gran forma nuestras vidas, al menos la mía, a partir de mañana.
Aunque no por ello, puedo olvidar que durante una gran instante... tuve una corazonada.